previsión 2025
IA y ...
El uso inteligente de las nuevas tecnologías será clave
En 2024, las tecnologías emergentes, como la IA y la robótica, siguieron evolucionando e influyendo en cómo y dónde trabajamos, y en cómo operan las industrias de todo el mundo. Los directivos de las empresas tendrán que dar prioridad a los usos inteligentes de la IA en 2025 y deben comprender cómo puede ayudar a su negocio a crecer. La adopción rápida y precipitada de esta tecnología dará lugar a nuevos puntos débiles y riesgos si una empresa no está totalmente preparada. Con esta tecnología en rápida evolución, es crucial que haya un mayor énfasis en la formación de los empleados, la gestión de las responsabilidades, la mitigación del aumento del riesgo de ciberataques y la actualización de la normativa internacional, federal y estatal.
En 2025, las organizaciones seguirán situando tecnologías emergentes como la IA y la robótica en el centro de sus estrategias empresariales. Estas ambiciones también irán acompañadas de nuevos riesgos, y los líderes de las empresas tendrán que comprender las vulnerabilidades de estas tecnologías, o se quedarán atrás.
Leah Cooper
Directora Digital Global
Comprender las vulnerabilidades de la IA y los riesgos emergentes
En 2025, los directivos estarán aún más tentados de adoptar e integrar rápidamente la IA en sus operaciones. Sin embargo, los directivos de las empresas deben contar con procedimientos y barreras de seguridad adecuados para garantizar que la tecnología impulse resultados empresariales satisfactorios sin crear riesgos y responsabilidades nuevos e indeseados. Los directivos que no dispongan de esta base tendrán dificultades cuando surjan nuevos riesgos, puntos débiles y obstáculos que pongan en peligro a sus empleados, clientes y marca.
En 2025 será imprescindible que los directivos de las empresas apliquen directrices y buenas prácticas en todas las operaciones para que sus empleados sepan cómo, cuándo y dónde deben aprovechar la IA. Entre los principales riesgos que los directivos deben tener en cuenta el año que viene figuran la instalación incorrecta, el acceso no autorizado y la posibilidad de que se produzcan una amplia gama de errores humanos, como una programación defectuosa. Sectores como la automoción y la cadena de suministro son especialmente vulnerables a estos factores a medida que se adopta la IA.
Por último, una parte vital de la implantación de la IA en 2025 será ayudar a los trabajadores a comprender cómo esta tecnología servirá de herramienta complementaria en sus puestos de trabajo. A medida que los directivos se enfrentan a las posibles reacciones negativas de los trabajadores, preocupados por su seguridad laboral, y los clientes se inquietan por el uso de la IA, es fundamental que las empresas se adapten a los mensajes, los métodos de comunicación y otros aspectos antes de implantar cualquier nueva tecnología.
La incertidumbre sobre la regulación de la IA augura problemas
Los directivos de las empresas deben mantenerse al día de las normativas federales y estatales o corren el riesgo de incumplirlas. Los líderes empresariales de éxito también se asegurarán de que los directivos instruyan adecuadamente a sus trabajadores sobre todas las directrices de forma rutinaria. 2025 será el año en que las empresas consideren la creación de equipos centrados exclusivamente en la IA, las nuevas políticas y el cumplimiento normativo, a medida que esta tecnología se integre cada vez más en el lugar de trabajo y los riesgos de incumplimiento y uso indebido sigan disparándose. Las empresas que hayan sentado las bases en 2024 para identificar los casos de uso clave de la IA, sepan cómo implantar esta tecnología de forma segura y eficaz en las operaciones empresariales y estén al tanto de todas las actualizaciones y revisiones normativas obtendrán una ventaja sustancial en el nuevo año.
Los agentes de IA aumentarán la productividad
El próximo año será testigo del auge de sistemas o programas informáticos que pondrán en acción los increíbles conocimientos que la IA está generando a partir de documentos y datos. Estos agentes de IA podrán realizar tareas de forma autónoma para automatizar procesos, tomar decisiones e interactuar con su entorno. Las empresas tendrán que evaluar cuándo y cómo confían en estos agentes para hacer avanzar un flujo de trabajo, especialmente los que se utilizan en entornos muy regulados y formulistas. Desarrollar la confianza en la capacidad de un agente para ejecutar un proceso requerirá una evolución iterativa y muy supervisada. Para conseguirlo, las empresas tendrán que incorporar los agentes de IA a la planificación estratégica y dotarlos de las fuentes de datos o aplicaciones que necesiten para lograr la automatización de tareas.
La IA se utilizará cada vez más para avanzar en las reclamaciones
En 2025, los asistentes y agentes de IA seguirán avanzando y se convertirán en un elemento aún más prominente en las operaciones comerciales, tanto para las empresas como para los proveedores de reclamaciones. Los líderes empresariales tendrán que entender cómo se puede aprovechar la IA para agilizar sus procesos de seguros y reclamaciones y cómo su proveedor de reclamaciones también aprovechará la IA. Los líderes en 2025 también necesitan asegurarse de que tienen cobertura para cualquier IA o tecnología emergente que estén utilizando en sus operaciones. Sin este conocimiento de cómo funciona la IA con el proceso y la póliza de siniestros, los líderes correrán el riesgo de no tener cobertura en caso de interrupción del negocio si la tecnología funcionara mal, por ejemplo. A medida que las tecnologías emergentes adquieren un papel más importante en este sector, los clientes, las marcas y los directivos deben trabajar con su proveedor de siniestros en 2025 para comprender plenamente el papel que desempeñará esta tecnología.
